Estamos viviendo muchos cambios en los últimos meses con esta pandemia que nos acecha y muchas veces no nos tomamos el tiempo necesario para procesar qué es lo que está pasando en nosotros, qué tipo de pensamientos estoy generando sobre el COVID-19, qué emociones surgen en mí cuando hablo de estos temas, cómo las expreso si lo hago, …
Todo esto está pasando con los niños también y necesitamos buscar espacios donde puedan expresar qué es lo que pasa en su interior respecto a este tema, aclarar algunos conceptos y tranquilizar sobre la situación que vivimos.
Estas semanas estamos trabajando sobre ello en el Colegio Arturo Soria con el alumnado de Educación Infantil y Primaria. Estamos ofreciendo espacios seguros donde a través del dibujo expresan cómo ven al virus y cómo les afecta en sus vidas. Salen mucho las palabras miedo, contagio, enfermedad y muerte. Palabras que a veces cuesta tratar con niños por el miedo y el rechazo que nos generan esas palabras a nosotros mismos y lo que ello supone.
Cuando hablamos y exteriorizamos estos aspectos de nosotros, estamos ofreciendo herramientas para conocer más que es lo que ocurre en su interior y ajustar la imagen que tienen de una realidad concreta. Si yo no hablo de un tema con mi alumnado/hijo, eso no quiere decir que el niño no se esté formando una imagen interna sobre ese tema. Y esa imagen, por lo general, es mucho más aterradora que la realidad misma. ¿Qué imagen tienen los peques de la enfermedad, de la muerte, del miedo,…? A veces también, al no tratar estos temas como algo natural, que es lo que es, estamos dando a entender que son cosas “oscuras” de las que no se habla, convirtiéndose en temas tabú, y eso hace que la imagen mental que se forman de ello sea aún mucho peor que lo que sería hablar con ellos del tema.
Desde los hogares, simplemente con hablar de cómo nos sentimos ante esta situación y preguntarles a ellos cómo lo viven, se estarán abriendo muchas puertas para el bienestar emocional familiar.