Este curso, en Educación Primaria, ponemos en marcha un taller semanal de desafíos matemáticos que permitan al alumno superar retos que exigen pensar y reflexionar antes de llevar a cabo la tarea.
Pretendemos que «pensar» no sea un objetivo, sino un procedimiento.
Este espacio nos brinda la oportunidad de potenciar el desarrollo de diversas competencias matemáticas, tales como la observación, la estimación, la creatividad, la representación y simbolización, el cálculo, el razonamiento y el pensamiento lógico.
Asimismo, este nuevo recurso es un marco perfecto para el trabajo cooperativo. Constituye un lugar ideal para el debate, la discusión y argumentación de ideas, fomentando la comunicación y la expresión matemática oral y escrita. Los alumnos pasan por todo un proceso de aprendizaje significativo, corrigiéndose, indagando y descubriendo juntos para, finalmente, llegar a un acuerdo consensuado.
El denominador común en estos talleres, y el ingrediente principal del éxito que están teniendo, es la EMOCIÓN que sienten nuestros alumnos, pues como bien dice nuestro maestro “La primera fase para resolver un problema no es comprender el problema, sino querer resolverlo” (J.A. Fernández Bravo).