En estas dos primeras semanas de curso ya somos un poco conscientes de que nos hemos convertido en una compañía de ópera.
¿Y qué es una compañía? Nosotros solitos hemos llegado a la definición de esta palabra “de mayores” y nos ha quedado así: “grupo de profesionales que trabajan para conseguir una cosa”.
¿Y qué “cosa” vamos a conseguir nosotros? Pues representar una ópera en junio que vamos a crear en su totalidad: el guión, la música, el vestuario, la decoración…todo estará inventado por nuestros profesionales. Nos sentimos ilusionados y nerviosos porque tenemos un gran reto por delante. Almudena nos ha dicho que surgirán problemas pero que vamos a aprender a solucionarlos entre todos.
Con la metáfora de “El Dominó” hemos comenzado a darnos cuenta de que todo lo que hagamos de forma individual va a repercutir en el resultado final de nuestra ópera. Mi trabajo, mi comportamiento, mi manera de estar en clase, la forma en la que trato a mis compañeros…todo lo que yo haga a lo largo del curso repercutirá en el grupo. Si una ficha se cae, se cae toda la compañía.